El Fascismo

Fascismo

El Fascismo toma el nombre de los fasces romanos, que es un hacha con 30 varas atadas de manera ritual. El fascismo no es un sistema político o económico es más bien una ideología.

El término “fascio” desde el punto ideológico surge en Italia en el momento en que logra la unificación. Este país es relativamente moderno, aunque tengamos referencia de su cultura en documentos romanos, es finalmente establecido en el siglo XIX. En este periodo aparece un grupo que surge de la base de los sindicatos obreros que se denominaban “fascio operayo”, “El fascio de los obreros” o expresiones como “el fascio de laboratorio” etc. En 1890 este termino se utiliza como partido político (grupos revolucionarios en Sicilia, para describir la unión campesina). Luego de la intervención italiana en la primera guerra mundial se radicalizan los antiguos Fascios y se militarizan.

El termino comienza a ser utilizado, sobre todo, en las asociaciones de veteranos que apoyaban a Benito Mussolini, los “Fasci italiani di combattimento”. A partir de allí la palabra “fascio” se asocia a ideología autoritaria del fascismo.

El fascista clásico es aquel individuo que exalta valores como la patria o la raza, sobre todo para movilizar a las masas, en la medida en que el Fascismo necesita un enemigo. En principio en opresión de minorías, como pueden ser los judíos o los gitanos. Los fascistas son muy militaristas pues ven al enemigo como un ente exterior, es decir buscan constantemente a su enemigo fuera de su país. Sin embargo, en comparación con los totalitarismos más de izquierda en que el enemigo es interno y está en la burguesía. El fascio no, el fascio busca él que está afuera de mi nación ese es mi enemigo. Pero en el fondo los conceptos se tocan y se tocan muchísimo.

El Fascismo al final deriva en un matriz socialista clásica, buscando un estado muy comunitario, muy intervencionista, revolucionarios, antiliberal y anticapitalista. Es donde no es difícil ver como Fascismo y comunismo comienzan a vincularse, por lo que al juntase encajarían bastante bien.

El antisemitismo que siempre se ha relacionado con el Fascismo, esta claro en el caso de Hitler, lo utilizaron para mantener el sistema. En la unión soviética el antisemitismo es de bastante utilidad después de 1948 en una campaña que se llamó “el desarraigo cosmopolita” donde muchos poetas de escritura “yiddish” (escritura judía) escritores y pintores fueron asesinados o arrestados. En la unión Soviética y también en Cuba se persiguió a los homosexuales.

En esta parte es donde es necesario reflexionar sobre determinados colectivos (Lgtbi) que se asocian a este tipo de ideas comunistas y realmente si revisamos en la historia estos grupos no fueron, especialmente, bien tratados. Documentado está que tampoco el Che Guevara respetara “demasiado” a los homosexuales.

Tampoco es que esté muy claro el vinculo que usan los políticos de izquierda con la naturaleza, esa postura populista de defender la tierra y volver los ojos del estado al campo cuando lo que nos muestra las estrategias modernas es que todo va a la industrialización.

En conclusión, existe una confusión, como una mezcla de ideas que realmente es muy bueno aclarar.