Vivimos en la franja ecuatorial de la tierra por lo que no tenemos estaciones. Hay miles de hectáreas de tierra salvaje y otra tanta sembrada. Aquí en Colombia hay tantas frutas que no las conocemos todas.
Los supermercados nos plastifican el cerebro; porque lo queremos todo en cajitas y bolsas.
Las plazas están allí fuera en los barrios donde aún los campesinos exponen sus productos y la sabiduría popular que las señoras nos regala y de manera gratuita, su ayuda está está allí para curarnos del insomnio o de un dolor de cabeza. Además de los desahumerios para espantar la gripa o los malos espíritus.
- Fernando Urrea
#multitextoverso
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